Panama Projects Overview
Información de contexto
Hay seis realidades que enfrenta Panamá independientemente del partido político que prevalezca en las elecciones estadounidenses de noviembre:
- Estados Unidos, con su economía colosal y dinámica y su diversidad cultural, sigue atrayendo a inmigrantes que huyen de la opresión y las privaciones de todo el mundo.
- El Tapón del Darién de Panamá seguirá siendo el corredor más transitado por esta marea humana que se dirige a través de Centroamérica hacia la frontera con Estados Unidos.
- Cualquier ayuda que pueda brindar Estados Unidos será sólo una pequeña fracción del costo para Panamá y otras naciones centroamericanas que enfrentan el flujo de refugiados.
- La infraestructura de Panamá ya está seriamente subinvertida, sin contar la presión adicional que soportan los más de 500.000 refugiados que viajan anualmente a lo largo del país de este a oeste.
- El gobierno panameño necesita urgentemente recaudar ingresos adicionales para realizar inversiones en infraestructura largamente esperadas en las provincias occidentales, incluyendo reparaciones de pavimento, autopistas circunferenciales para la Ruta Interamericana 1 alrededor de David, Santiago y Penonomé, y un tren que vaya de la capital a Costa Rica, así como los enormes gastos de adquisición de tierras, reubicación y construcción para el plan de Río Indio para expandir el suministro de agua al Canal.
- El cobro de peajes en los puentes ahora gratuitos sobre el Canal y la asignación de los ingresos a los proyectos antes mencionados es la mejor manera de cobrar a quienes utilizan la infraestructura para sufragar su costo y de paso establecer un cordón para rastrear a los migrantes y asegurar que no establezcan residencia a largo plazo en el país sin permiso de trabajo o debido a otras circunstancias especiales.
A nadie le gustan los impuestos y las tasas, pero el sistema de “algo a cambio de nada” no es una ley de este mundo y Panamá necesita más dinero para hacer frente a los múltiples desafíos que enfrenta si quiere recuperar su preciado estatus de economía más dinámica de América Latina. Los automovilistas y camioneros que cruzan los tres puentes existentes han estado disfrutando de un viaje gratis, sin contribuir en nada al costo de oportunidad de la tierra ocupada para los accesos a la autopista ni a los gastos de construcción y mantenimiento de estas instalaciones. Estas compiten con otros servicios públicos esenciales que dependen del tesoro general de Panamá. La mayoría de los cruces de vías fluviales y autopistas en todo el mundo se financian con peajes. El cobro de peajes en los puentes también sería un medio para controlar el flujo de inmigrantes que ingresan al Tapón del Darién, la gran mayoría de los cuales se dirigen a Costa Rica.
Presumably they have not been issued transponders like those in use on Corridors Sur & Norte, and so they would have to register with the authorities, and those with the means or funded by NGO’s would have to pay something to cross the bridge. They would also have to agree to have a tracking device affixed to their vehicle with a deadline for surrendering the device at the Costa Rican border. A toll plaza should be included in plans for the 4th Se supone que no se les han entregado transpondedores como los que se usan en los Corredores Sur y Norte, por lo que tendrían que registrarse con las autoridades, y aquellos con los medios o financiados por ONG tendrían que pagar algo para cruzar el puente. También tendrían que aceptar que se les coloque un dispositivo de seguimiento en su vehículo y que se les fije una fecha límite para entregarlo en la frontera con Costa Rica. Se debería incluir una plaza de peaje en los planes para el cuarto puente. Se necesitarán arreglos especiales para la Línea 3 del Metro de la Ciudad de Panamá para asegurar que sólo los ciudadanos panameños, además de los turistas y los extranjeros autorizados, tengan acceso. Perfeccionar el sistema de peajes, quién tiene derecho a los créditos, determinar si es unidireccional hacia el oeste o bidireccional y la carga relativa que recae sobre los ciudadanos y residentes frente a los inmigrantes no autorizados llevará algún tiempo. Pero valdrá la pena que el Ministerio de Obras Públicas tenga los fondos para embarcarse en la adquisición anticipada de tierras para proteger el derecho de paso para el tren y las carreteras de circunvalación.
El flujo continuo de migrantes y el flujo de dinero propuesto se ilustran en los dos gráficos siguientes.
Los inversionistas extranjeros, impresionados por el sacrificio de Panamá para enderezar su “barco” financieramente y su enfoque único para aprovechar la infraestructura para controlar la crisis migratoria en ausencia de un liderazgo efectivo de los EE.UU., estarán más inclinados a comprar bonos para el tren, nuevas autopistas –también con peaje– así como el proyecto Río Indio de la ACP.
La reacción negativa a la imposición de peajes en puentes que han sido “gratuitos” es inevitable, pero se puede superar eficazmente si se sopesan las alternativas de recortar servicios vitales, aumentar los impuestos a las ventas, a la renta o a la propiedad, o descuidar la infraestructura en detrimento del comercio.
La batalla por los dólares del turismo y la inversión es brutalmente competitiva y debe ganarse si Panamá quiere recuperar su estatus como actor efectivo en el siglo XXI.